“Se va de viaje”: el platense que recorre el mundo y busca “contagiar el bicho viajero”

Viene viajando desde hace más de la mitad de su vida y quiere transmitir las ventajas de animarse no solo a conocer distintos lugares del país y del mundo, sino también a que el dinero no sea un obstáculo y que el objetivo sea enriquecerse interiormente en cada experiencia.

Filma sus travesías en YouTube, donde lanzó un canal que se llama “Se va de viaje”, para mostrar los destinos que recorre y un Instagram donde va compartiendo su aventura: @sevadeviaje.

Sebastián dialogó a solas con Capital 24 y le contó, a fondo, cómo vive esta “vida de película”.

 Contame un poco de vos…

 Nací en La Plata, soy periodista, hice 15 años de radio y el formato audiovisual es algo que siempre me llamó la atención: los hermanos Eugenio y Sebastián (“Culini”) Weinbaum, de MDQ, a mí me gustaba ese tipo de programas. Me llamaban la atención pero no busco eso, busco otra cosa: a los 18 salí con la carpa por primera vez, hice mucho camping y el viaje como estilo de vida me ha enriquecido desde la mitad de mi vida, te puedo decir. 

 ¿Cómo surge y cuándo surge este proyecto "Se va de viaje"?

 Yo sabía  que en algún momento iba a llegar el tiempo de viajar y contarlo y esto es un poco lo que estoy experimentando. Con la camarita empecé a hacer videos y nació “Se va de viaje”: un proyecto como de vida y de viaje, a largo plazo busco tener una página de internet y medio multiplataforma, tener vídeos, crónicas, podcasts llenas de percepción del viajero, de quien viaja, cómo tiene esa estrategia para contar, invitar, describir lo que está pasando.

 ¿Cuál es el objetivo de tu iniciativa? ¿Que buscás transmitir y mostrar?

 Que alguien que lo vea tenga ganas de ir: ahí está el vuelto de lo que estoy haciendo y de los viajes que hago. Hay veces que estoy solo y a eso no lo podés compartir con alguien. Pero cuando uno vuelve, cuando uno lo cuenta en los distintos formatos, sea en un asado, sea en una crónica, sea en un video o en un post de Instagram, que enganche a otras personas a viajar, me parece que ahí hay una gran llave y creo que ahí es como que se cierra un poco el rulo de lo que busco. Todos tenemos un bicho viajero interior, como el niño interior, y me parece que con estas crónicas, con estos videos de YouTube, con esta manera de contarlo busco que todos se animen a ir a un destino que yo les puedo mostrar: o a un viaje de corta, media o larga distancia, ese es el fin, viajar. 

 ¿A qué lugares has viajado y qué experiencia te llevas de cada uno? 

 Tuve mucha suerte. Hasta ahora estuve en 22 países. Amo mi país, me encanta Argentina. Ser argentino me ha ayudado estando afuera. Obvio que Maradona y Messi te lo dicen en todas partes. El año pasado viajé a los Balcanes. Estuve en Croacia, en Bosnia-Herzegovina, que hoy es un país. Estuve en Montenegro, en Serbia, en Israel, Palestina, Jordania y Chipre, en territorios en disputa que son lugares donde hoy está complicado para poder transitar, y está todo muy militarizado, y hay mucha violencia, hay mucha tensión y quedé también enganchado de cosas que viví. ¿Qué me llevo de cada uno? Experiencias que me cambian para siempre. Estuve en Colombia, en lugares donde el ejército está parado con armas largas y hay retenes militares por todas partes. No nos lo imaginamos nosotros, en nuestra vida cotidiana, que vamos a tomar el bondi para ir al trabajo. 

 ¿Cómo elegís los destinos?

 Según las circunstancias. Hay veces que por ofertas, otras  porque me entero de alguna historia curiosa que quiero ir a buscar, hay veces que porque alguien que fue me lo recomienda. Fui a destinos que quería ir, me saqué las ganas de conocer un montón de destinos que había soñado con conocer y creo nunca me preparo de la mejor manera, pero trato de estudiar o conocer el destino donde voy  pero también he ido a ciegas y he conocido las mejores cosas de cada país.

 ¿Qué repercusión sentís que tiene lo que hacés? 

 Me parece que estoy teniendo una calidad de repercusión por sobre la cantidad, que no la busco. Viajar es algo que me gusta y este lenguaje audiovisual que estoy aprendiendo a usar para contarlo, me parece que está bueno y que estoy bastante conforme en lo que estoy produciendo. Yo le pido a todos mis contactos lo que hago y busco que me digan qué les gustó, qué no, qué les interesa y armo los videos: algunos salen más largos, otros más entretenidos, otros más dinámicos. Trato de ir afinando el estilo y el producto lo mejor posible. 

 Sos platense y lo que hacés puede alentar a otros a inspirarse en vos. ¿Qué les aconsejás?

 Al que nunca viajó le aconsejo que lo haga y que no se case con el primer resultado malo, si es que lo tiene. El viaje es como un medio revelador de cosas, de uno mismo, le aconsejo que lo busquen, que busquen viajar con ese fin. Me parece que eso está bueno. 

 ¿Qué planes a futuro tenés? ¿Qué lugares querés conocer y por qué?

 Poder seguir viajando. El viaje también para incomodar, para incomodarse a uno, para saber dónde estamos, y las temáticas que contamos en los viajes tiene que ver con que somos un medio de comunicación: esto no deja de ser periodismo por irme de viaje, sino todo lo contrario. Entonces el periodismo se trata de contar, de incomodar, de concientizar, de tomar perspectiva sobre las cosas. Me gustaría conocer la Antártida, algo de África. Gente, cruzarme con gente que me deja anécdotas, que se han ganado una parcela en mi corazón. 

 ¿Qué obstáculos has encontrado en todo este tiempo?

 El dinero puede ser un obstáculo pero yo soy de invitar a pensar a que el dinero no puede ser un obstáculo. Si queremos ir a Mar del Plata, podemos ir en tren. Yo pienso en todos los bolsillos. En mi caso, respecto a los obstáculos que tuve, recuerdo que una vez una crecida de un río de pronto ha sido un obstáculo para no poder ir a otro lugar. Otra vez, unos vientos no me dejaron llegar a un lugar en Brasil pero los pude sortear exitosamente. Anécdotas tengo un montón: cuando volví a Israel, la Mossad me detuvo en el aeropuerto de Israel, de Tel Aviv, me hicieron un interrogatorio muy “heavy” de tres horas, de eso no me olvido más.