La “Cartoneta”: su dueño está dispuesto a recorrer el país para reponer las cubiertas

El triciclo reacondicionado anda por La Plata, Berisso y Ensenada recolectando cartones, latas y todo aquello que quieran donarle para subsistir. Pero hace unos días se le rompió parte de su herramienta de trabajo.

Actualidad 14 de junio de 2023
Imagen de WhatsApp 2023-06-13 a las 23.07.16

Néstor Fabián Escudero tiene 42 años. Vive en Villa Elvira y desde que se quedó sin trabajo junta cartones y latas para poder sobrellevar el día a día honrada y dignamente. En diálogo con Capital 24 contó su historia de vida y no pide ayuda económica. Aunque se le rompieron las cubiertas de su “Cartoneta”, piensa en seguir haciendo un esfuerzo para comprar, él mismo, lo que le falta.

“Primero fue un triciclo común y corriente con ruedas de bicicleta y como yo antes trabajaba en una Cooperativa y me dejaron sin laburo en la época de (Mauricio) Macri y a mi señora también, teníamos unas monedas guardadas y fuimos juntando”, comenzó diciendo Néstor.

Y agregó que en ese entonces, les salió la posibilidad de comprar el carrito al que bautizaron más tarde con un nombre muy especial: “Tuvimos la oportunidad de comprar este triciclo porque un hombre necesitaba plata y vendía éste, y mi mujer  me aconsejó hacerlo para juntar cartones y “aunque sea, con eso, ir tirando”.

 Ejemplo de vida

 Néstor nunca perdió la esperanza ni la fuerza necesaria para ir hacia adelante: “De a poco fuimos juntando moneda por moneda. Primero hicimos un modelo y no resultó porque era inestable para manejarlo y era muy poco el cartón que juntábamos así que un herrero amigo me aconsejó “acostar” la caja y ahí se formó ‘la Cartoneta’. Ahí le pusimos el techo y cada tanto alguna rotura tiene”.

A pesar de las dificultades que le puso la vida como a cualquier recolector, el protagonista de esta historia le cuenta a Capital 24 sobre el esfuerzo que realiza: “Mientras no se me rompa ando todo el día juntando, si hay algún comedor o algo cerca, voy a pedir algo, una viandita, descanso un rato y sigo de largo hasta las 5 ó 6 de la tarde que empieza a oscurecer”, y relató cómo sobrelleva el día a día: “No ganamos mucho, ganamos 1.500 ó 1.200 pesos por jornada. Hay mucha gente en mi barrio que también se han quedado sin laburo y han tenido que salir con los carritos también”, aseguró.

En este sentido, Néstor cuenta que anda “por todos lados”: “No tengo un lugar fijo al que voy. Recorro La Plata, Berisso, Ensenada, Los Hornos, donde me llamen yo voy, mientras esté sana la ‘Cartoneta’ como la bauticé yo, salgo por todos lados” y explicó cómo surgió el nombre de su carrito: “Se lo puse cuando fue el tema del Mundial de fútbol, el tema de la “Scaloneta” y como yo juntaba cartones, no sabía cómo bautizarla y se me ocurrió eso”.

 Las dificultades 

 “La ‘Cartoneta’ me ayuda a cartonear y muchos me han preguntado si la vendo pero no, no lo vendo porque es mi sostén que me ayuda cuando está sana y con eso traigo unas monedas, para el día me alcanza”, manifiesta Escudero, y agrega que tiene pensado hacerle una página exclusiva de Facebook “para que tenga más propaganda y poder juntar un poco más”.

Néstor reconoce que está tratando de dejar de hacerlo, “no porque sea un trabajo indigno, prefiero hacer eso y no otras cosas como robar. Pero quiero ver si puedo salir y juntar plata para comprarme algo, juguetes, golosinas y así poder vender en las plazas con un permiso especial del municipio: salir con mi señora, tomar unos mates y de paso vender cosas”.

Después de varios años de recorrer día a día la ciudad en busca de cartones y latas, Néstor atraviesa la peor dificultad. Se le explotaron las cubiertas: “Son de moto, de Zanella 50 y cuestan $13.000 cada una. Pero yo no quiero que la gente me lo regale, me lo quiero ganar, quiero juntar la plata para ir y comprarlo yo”, le cuenta a este medio.

Para eso tuvo una idea muy especial. Le relata a Capital 24 que lo que tiene pensado es lo siguiente: “Como tengo una bicicleta, quiero equiparla bien y con eso viajar por algunas provincias. Recorrería el país a cambio de que la gente cada tantos kilómetros me pueda donar 50 ó 100 pesos. Es como una retribución, ellos me donan una cosa a medida que yo voy avanzando cierta cantidad de kilómetros y les mando fotos o videos de los lugares a los que viajo: recorrería partes del país hasta que llegue al propósito de juntar la plata que necesito para comprar las cubiertas”.

Sin dudas, cuando hay fuerza, hay ganas y cuando hay ganas, se puede. Todos aquellos que quieran ayudarlo a lograr su propósito, pueden donarle al Alias la.Cartoneta o bien comunicarse con él telefónicamente o vía WhatsApp al 221-350-4950.

 

Te puede interesar
NOTA

Salvavidas de plomo: las deudas que sostienen la heladera

Actualidad 29 de octubre de 2025

Con salarios licuados, tarifas impagables y precios que no ceden, casi la mitad de los argentinos usa crédito para comprar alimentos. El endeudamiento dejó de ser una decisión de consumo y se volvió una política social de hecho: la deuda cotidiana como salario encubierto.

NOTA

El pacto del Sur: por qué Milei se volvió la mejor inversión de Trump

Actualidad 27 de octubre de 2025

Mientras Estados Unidos y China negocian un acuerdo histórico, Donald Trump apostó su capital político y financiero a Javier Milei. El respaldo del republicano estabilizó la economía argentina y selló una alianza que no es ideológica, sino estratégica: recursos, Antártida y control del Atlántico Sur.

NOTA

Werthein se fue antes de las elecciones y creó caos

Actualidad 22 de octubre de 2025

El canciller presentó su renuncia cuatro días antes de las legislativas. No esperó el anuncio del recambio de gabinete que Milei planeaba para después del domingo. En la trastienda: diplomacia paralela de Santiago Caputo, destratos internos y la decisión de un empresario con agenda propia de no “fumarse boludeces”.

Ranking
15 TERCERA

“La Toretto” y su amiga Valentina en la recta final al juicio

Región30 de octubre de 2025

Felicitas Alvite acudió a los tribunales, desde su casa donde cumple arresto domiciliario. Ingresó al fuero de 8 y 56, por un portón de rejas lateral para evitar a la prensa. Pero no pudo. Lo mismo hizo al ingresar a la sala de audiencias, donde estaban las partes y los familiares del músico Walter Armand, sentándose de espaldas al público.